Amor y cuidado a los animales en situación de abandono

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible despliegan una serie de tareas para la preservación de todas las formas de vida en el planeta. Y el activismo a favor de los animales sintoniza con esa responsabilidad, tal como lo es el ejemplo del Refugio Canino El Valle, en Caracas.

La gravedad de la caída en la calidad de vida en Venezuela no ha dejado por fuera a los animales, y hoy en día se evidencia un mayor número de mascotas abandonadas en las vías públicas. Sus dueños, o bien se marchan del país, o no quieren destinar parte de su mermado presupuesto familiar a las obligaciones con sus mascotas.
En el programa “Responsabilidad Social Hoy” de Fedecámaras Radio, conducido por Xiomara Zambrano, estuvo  Cristina Rincón, fundadora de la ONG Refugio Canino El Valle. Ella es una joven que además de ocuparse de sus actividades profesionales, se dedica al activismo por los animales, especialmente al llamado “mejor amigo del hombre”.  
La organización cuenta físicamente con un espacio, ubicado en la zona caraqueña del mismo nombre, y se ocupa de rescatar, cuidar, darles afecto y ubicar un hogar a los perros abandonados.
Rincón cuenta el origen de su proyecto, cuya raíz es su genuina sensibilidad hacia el género. “Desde muy pequeña sentí ese amor por ellos, tanto que fui rescatando uno, dos y tres al mismo tiempo, logrando así que la casa se llenara de perros y nos diera la idea de expandirnos, como lo hicimos en el año 2007”.

La ONG tiene 12 años de funcionamiento y servicio a la comunidad. “A nivel personal, nunca tomé clases  ni me eduqué para desempeñar lo que hago con ellos, aunque si soy diseñador gráfico y orfebre. Rescatar perros es algo que me gusta y creo que la satisfacción de verlos alegres, en un hogar donde son amados y respetados no se compara con los planos profesionales”, expreso Rincón.
Más que un proyecto de trabajo, se trata de sinergia familiar, con la participación de los padres de la fundadora, además de voluntarios. Todos ayudan en tareas, como bañarlos, darles de comer y en atender las necesidades básicas. Los donantes han cooperado con mejoras al lugar, permitiendo contar con  un área apta para el aseo, mejor calidad y más comodidad”.

Al indagar por el impacto del agravamiento de las condiciones del país, la activista indicó que ha sido muy notorio La labor se ha duplicado, porque al mes dejan dos perros en el refugio. “A diferencia de años anteriores, en estos últimos, hemos tenido un incremento notable y creemos que la situación será peor, pero nos estamos preparado para ello”. 

La retribución a esa acción, según palabras de Cristina, es el agradecimiento que hace el animal al ser humano con sus gesto: una mirada que trasmite la gran felicidad por recibir afecto y atención. 

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